Turquía (Algunas notas - Ruta)
Agosto 2002
Día 1 – 2 - 3: Estambul
Volamos dirección a Estambul. En
la época del Imperio Romano y Bizantino fue conocida como Constantinopla. Estambul es
una ciudad transcontinental puesto que parte de ella está en Europa y otra parte en Asia.
Dimos una vuelta por la ciudad antes de irnos a dormir. Comenzamos por la Mezquita Beyazit Camii, es la más antigua de la ciudad, excluyendo a Santa Sofía, aunque esta última comenzó siendo un Templo Cristiano, está situada al lado de la Universidad , fijaros en la Puerta de la Facultad de Derecho, es muy bonita.
Después dimos una vuelta por el
Gran Bazar, lleno de tiendas y de diferentes olores a especias. Todo el bazar
es cubierto. Muy interesantes son las prendas de piel, puedes encontrar prendas
a muy buen precio y de buena calidad. Y por supuesto nuestra primera cena en este país fue un kebab en un
restaurante que nos encontramos por el camino.
Comenzamos el día siguiente visitando
la Mezquita
de Suleimán el Magnífico, mezquita imperial otomana.
Después nos dirigimos a la Basílica de Santa Sofía, de estilo bizantino, que como comentaba, inicialmente era cristiana, pero fue tomada por el Imperio Otomano y la convirtieron en mezquita. El interior es impresionante, me llamaron especialmente la atención los enormes medallones decorativos. De todas formas, a mí me pilló en obras el interior y fue un poco chasco L.
Después nos dirigimos a la Basílica de Santa Sofía, de estilo bizantino, que como comentaba, inicialmente era cristiana, pero fue tomada por el Imperio Otomano y la convirtieron en mezquita. El interior es impresionante, me llamaron especialmente la atención los enormes medallones decorativos. De todas formas, a mí me pilló en obras el interior y fue un poco chasco L.
Continuamos por la Mezquita Azul , situada justo en
frente de Santa Sofía. Es la mezquita más importante de Estambul, es
impresionante. Lo que más llama la atención de esta mezquita es que tiene 6
minaretes en vez de 4, esto provocó mucha polémica en el momento de su
construcción ya que la Meca
también tenía 6, para evitar esta polémica, lo que se hizo fue construir un séptimo minarete en la Meca y asunto arreglado J. El interior de esta
mezquita contiene más de 20.000 azulejos de color azul, de ahí su nombre.
Visitamos el Hipódromo romano, el
centro deportivo y social de Constantinopla, que actualmente es una plaza llamada
Sultán Ahmet. En esta plaza se encuentra el Obelisco de Teodosio. Teodosio, el
Grande, adornó el hipódromo con este obelisco que trajo desde Egipto,
colocándolo en el centro de la pista. Fue tallado en granito rosa y erigido
originalmente en el Tempo de Karnak (Luxor). Para trasladarlo desde Egipto
hasta Estambul, se dividió en tres piezas, aunque sólo sobrevive la parte superior, que
se encuentra sobre un pedestal de mármol, en el mismo lugar donde Teodosio la
colocó inicialmente.
El Palacio de Topkapi demuestra
el poder que tenía Constantinopla en la época del Imperio Otomano. No dejéis de
visitar el Tesoro, dónde se encuentra el diamante del cucharero, un diamante de
88 quilates que perteneció a la madre de Napoleón, o el puñal topkapi, hecho de
oro con esmeraldas incrustradas. El harén era el lugar donde residía el Sultán,
su familia y sus mujeres (entre 500 y 800 de alto nivel cultural), la Reina Madre era la que se
encargaba del Harén. Haced estas visitas a primera hora, en cuanto entréis en
el Palacio, puesto que luego se forman grandes colas.
Al día siguiente fuimos a ver la Mezquita Nueva , situada
al lado del puerto, impresionan sus cúpulas. Al lado se encuentra el
bazar de las especias.
En el puerto cogimos un barquito
que nos dio un paseo por el Bósforo, estrecho que separa Asia y Europa. Hay unas
vistas impresionantes de la ciudad, se puede ver la fortaleza, el Palacio de
Dollmabahçe, la Torre Gálata , etc.
Recordad que para entrar en las
mezquitas hay que ir descalzos y llevar ropa apropiada. Nosotras tenemos que llevar la
cabeza y hombros cubiertos, yo os recomiendo llevar algún pañuelo en el bolso o mochila, pero de
todas formas, en la entrada facilitan pañuelos o túnicas para taparse.
Si podéis, acercaros una noche a
un restaurante con espectáculo donde ver la famosa danza del vientre, es
impresionante como se mueven, y después siempre se acercan para que las
invitéis a alguna copa y/o lo que se tercie L.
Y por supuesto no dejéis pasar ir
a un baño turco. Nosotros fuimos a uno que nos recomendaron al lado de la
universidad, es fantástico. Eso sí, los hombres por un lado y las mujeres por
otro.
Día 4: Ankara
Llegamos a la capital de Turquía,
Ankara. Nuestra primera visita fue al Mausoleo de Atarurk, líder de la Guerra de Independencia
Turca, fundador y primer presidente de la República de Turquía, el único que ha estado 3
legislaturas en el poder.
En Ankara también visitamos el
Museo de las Civilizaciones de Anatolia, el cuál contiene la mayor muestra
arqueológica recogida en territorio turco.
Salimos en dirección a Capadocia, una visita imprescindible en Turquía.
Día 5: Capadocia
En la Capadocia visitamos los
paisajes lunares de Urgüp y Nevsehir, con sus poblados trogloditas. Esta región
se caracteriza por tener una formación geológica única en el mundo. Estas
características geológicas son las que hacen que sus paisajes se describan como
paisajes lunares, la tierra es lo suficientemente débil para permitir que el ser
humano construya sus casa escarbando en la roca, por ello esta zona está llena
de cavernas naturales y artificiales.
La verdad es que es un paisaje
impresionante, pasad a alguna y verlas por dentro, no os preocupéis porque
alguna de estas casas trogloditas son bares, por lo que os recomiendo pasar a
tomar uno de sus fantásticos tés y disfrutar de la construcción.
Paseamos por el Museo al aire
libre de Goreme, con sus iglesias ortodoxas excavadas en las rocas, con
pinturas y frescos del siglo X. Nos acercamos a la ciudad subterránea de
Kaymakli, construida por los cristianos perseguidos hace miles de años,
alrededor del siglo V. Podéis bajar a visitar una casa subterránea, es curioso
la cantidad de pasadizos que construyeron en el subsuelo, toda una ciudad.
Día 6: Konya
Konya es la antigua capital del
Imperio Selyucida. Visitamos el Mausoleo de Mevlana, fundador de la secta de
derviches danzantes. Este mausoleo se halla junto a la Mezquita del Sultán Selim
II, el museo brinda la posibilidad de disfrutar de alfombras muy interesantes,
instrumentos de música sacra, el poema épico místico, el principal manuscrito,
la vestimenta de los Derviches, etc. En el exterior del Mausoleo llama la
atención la cúpula turquesa.
Si podéis disfrutar de una
actuación de los Derviches danzantes, aprovechadlo es muy curioso de ver. Yo en
Turquía no tuve oportunidad, pero sí que disfruté de ellos en mi visita a Siria.
Esa noche llegamos a Pamukkale, nos alojamos en el Hotel Lycus River, donde por la noche pudimos disfrutar de
sus piscinas termales, a relajarse para terminar el día J.
Día 7: Pamukkale – Afrodisias - Mileto
Por la mañana nos acercamos a la
necrópolis de Hierápolis, una interesante ciudad romana.
Posteriormente fuimos a visitar
el “Castillo de Algodón”, extraordinario paraje natural con manantiales de agua
caliente con sedimentos calcáreos, que han formados unas piscinas blancas en la
falda de las colinas. Si tenéis alguna duda de acercaros o no a visitar
Pamukkale, yo os recomiendo que no dejéis pasar la visita, merece la pena.
Continuamos el camino hacia
Afrodisias, donde visitamos esta famosa ciudad romana en la que destaca su
estadio intacto.
Visitamos Mileto, antiguamente
una de las ciudades más importantes de Asia Menor, destaca su teatro, las
Termas de Faustina y la Puerta Sagrada.
Día 8: Éfeso
Nuestra primera visita fue a
Meryamana, donde según la tradición vivió la Virgen María. De aquí fuimos a
Éfeso donde se encuentra la ciudad grecorromana mejor conservada del mundo, importante por la presencia del cristianismo desde el siglo I. Vimos el Odeón,
el Templo de Adriano, la
Biblioteca de Celso (espectacular), etc.
De camino paramos a tomar algo en
Serince, un pueblecito encantador. Recomendable para hacer una parada rápida.
Día 9: Bursa
Bursa es la capital de la seda, aquí visitamos el Mausoleo del Sultán Memmet, la Mezquita Verde, paseamos por el
Mercado de la seda, etc.
Esa tarde regresamos a Estambul.
Día 10 - 11 - 12: Estambul
Volvimos a Estambul dónde
seguimos haciendo algunas visitas que nos faltaban.
Fuimos al Museo Arqueológico,
dividido en tres zonas: la primera, los museos arqueológicos donde sobresale la
gran colección de sarcófagos, entre ellos se encuentra el Sarcófago de
Alejandro, la segunda, la colección de arte oriental, lo más interesante son
las partes de la Puerta Babilónica
de Istar y por último, la colección de cerámicas y joyas ubicada en el
Pabellón de los Azulejos.
Subimos a la Torre Gálata , una de las torres
más antiguas del mundo. Desde ella hay unas vistas muy bonitas de la ciudad, os
recomiendo subir en el momento de la puesta de sol, ya que da un encanto
especial a las vistas.
Y por supuesto callejeamos, visitamos
la calle Kumkapi llena de restaurantes que te ofrecen productos del mar, disfrutamos de los tés en diferentes bares, etc.
Al día siguiente dimos una última
vuelta por la ciudad, visitando La Mezquita
Nueva , situada en el Cuerno de Oro.
El cuerno de Oro es un estuario
prehistórico inundado, tiene 7,5 Km de largo y 750 m de ancho. Está situado al inicio
del Bósforo o estrecho de Estambul, dicho estrecho es el que comunica el mar
de Mármara con el mar Negro. Este emplazamiento que forma un puerto natural
espectacular ha servido de protección a la ciudad de ataques navales.
Y para terminar visitamos San
Salvador en Chora, el Museo Chora tiene unos mosaicos espectaculares, sus
frescos y mosaicos bizantinos están considerados los mejor conservados del mundo. Como Santa Sofía, San Salvador de Chora fue convertida en Mezquita después de
la conquista de Constantinopla por el Imperio Otoamano. Las pinturas fueron
tapadas con yeso cuando se convirtió en Mezquita, y es posible que esto ayudara
a su conservación. Tened en cuenta que esta iglesia se encuentra a las afueras
de Estambul.
Al día siguiente visitamos el
acueducto de Valente, situado en la parte europea de Estambul. Se utilizaba
para trasladar agua al ninfeum (fuente monumental) desde el bosque de Belgrad.
Y así fue como terminó nuestra
visita a Turquía, ese día volamos de vuelta a casa L.
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